¿Cómo escoges una cámara? En este artículo, usaremos ejemplos del día a día en la vida del consumidor; smartphones, autos, computadoras, etc… para poner los últimos desarrollos de cámaras en perspectiva. Y nos preguntamos: ¿Estamos llegando al punto donde no siempre necesitamos lo mejor y lo más nuevo?
Hace poco en RedShark se publicó un artículo titulado “Good Enough” (“Suficientemente Bueno”) en el cual se menciona que de alguna forma las cámaras modernas se están volviendo tan buenas en capturar imágenes que tenemos que ver más allá de la resolución para escoger entre ellas. El punto no era que todas las cámaras fueran lo mismo: sino al contrario. Ahora hay más diversidad que nunca; es solo que si usas la métrica predominante -pixeles – para escoger entre ellas, no puedes tomar una decisión.
He estado pensando más sobre esto. Va mas a fondo. Y eso es porque a dondequiera que volteemos, los dispositivos que compramos sobrepasan nuestras necesidades como usuario.
El otro día compre un teléfono. Necesitaba un repuesto en caso de que mi teléfono que ya me estaba dando problemas fallara completamente durante mi estancia en Las Vegas para el NAB Show. El hecho de que se me cayó probablemente no ayudó mucho, pero él tenía suficientes problemas como para pensar que no debería confiar totalmente en el.
Mi teléfono es un Samsung Galaxy Note II, un gran teléfono, pero caro. Mucho más, de hecho que una laptop básica o de precio medio. Así que no quería que mi repuesto costará lo mismo.
Al mismo tiempo, no quería que mi repuesto fuera tan básico. Yo soy un usuario de los smartphone. Los uso poco para hacer llamadas tradicionales (para eso esta Skype) pero si quiero que mi mail se esté actualizando constantemente y también uso las redes sociales (mis publicaciones algunas veces se originan en mi smartphone).
No tienes que gastar tanto
Afortunadamente, No tuve que gastar tanto. Hay un “nuevo” teléfono llamado Moto g. El cual es un buen candidato para esta tarea. Tiene Android limpio y se ve bien. El problema es que todas
las reseñas dicen que no está al borde de la tecnología y le falta un poco de poder.
Puedes pensar que eso me desanimaría. Normalmente no compro cosas que se quedaron atrás en la curva -Soy demasiado geek para eso. Pero el punto es que Motorola no se quedó atrás en esta curva, porque mi otro teléfono ya tiene más de año y medio: prehistórico en términos de smartphones.
Así que para mi, el Moto G, el cual cuesta menos de un cuarto del precio total del Samsung, suena bastante bien. De hecho, es rápido. Y hace todo lo que necesito.
Pido una disculpa por extenderme tanto en el tema de los smartphones. Pero lo mismo esta pasando por todos lados. Manejo un auto que no esta hecho por un fabricante prestigioso como BMW, Audi o Mercedes. Es un Ford. E incluso aunque he manejado (y tenido) algunos de las otras marcas, Prefiero Ford. Tal vez no tengan la misma calidad en interiores, pero en términos de manejabilidad, confiabilidad y competencia pura, es bueno y considerablemente más barato. Si puedo, compraré otro en cuanto lo necesite.
Es tentador decir que con el amplio rango de productos de consumidor y profesionales, ha llegado el punto en que no necesitan mejorar. Pero es mas que solo eso, debido a que nuestras expectativas y requerimientos cambian tan rápido como los productos mismos.
Los productos cambian porque vivimos en una era de progreso exponencial donde la generación actual de herramientas diseña la siguiente de mayor poder, y donde podemos guardar mas y mas en un chip del mismo tamaño. Al mismo tiempo combinamos tecnologías interconectables para crear nuevas casi de la nada (piensa en Google Maps “Mashups”)
Un resultado de esto es que el ciclo de los productos se ha reducido. Cuando mis padres eran jóvenes, compraban un radio, y cuando fallaba años después, se reparaba o comprabas uno nuevo, y muy probablemente sería uno del mismo modelo. Ahora el ciclo de los productos en electrónica es de aproximadamente entre 6 meses y 6 semanas. A un fabricante le llevará cerca de un año actualizar su modelo principal, pero pero en este tiempo varios competidores mejoraran el performance y subirán el estándar para cuando el modelo original sea reemplazado.
Los consumidores se ven atrapados en este frenesí de lanzamientos, y sus expectativas son elevadas, pero estas expectativas pueden no corresponder con sus necesidades verdaderas. Puedes pensar en tu siguiente tablet, que tenga el poder de una computadora de escritorio (y con el nuevo procesador “A” probablemente casi lo logren) pero si para lo único que la ocupar es para navegar en la web y leer tus libros digitales, realmente no necesitas todo ese poder.
Los fabricantes están consientes de esto y tratan de “mejorar” sus productos para todos los consumidores, tal vez no necesites tanta velocidad, pero tal vez si necesitas una resolución más alta en tu pantalla, o quieres que tu dispositivo sea más ligero.
Pero el hecho se mantiene, la generación anterior tal vez cumplía bien con tus necesidades. Si puedes vivir con la vergüenza de no tener el último modelo, entonces tal vez te vaya bien comprándote uno anterior.
Hay excepciones a la regla. No te vas a comprar una cámara con definición estándar hoy en día, a menos que planees retirarte pronto del negocio. Tampoco deberías comprar productos que dejarán de ser soportados. Se hace fácil comprar productos baratos, pero por ejemplo, te compras uno que no corra sobre las últimas versiones de los sistemas operativos y básicamente estarás comprando un pisapapeles.
4K es muy demandante.
Así que, ¿Qué pasa con las cámaras y demás equipo de producción? Bueno, en cuanto a las computadoras, en especial el 4K, es muy demandante. Tal vez deberías comprar la computadora más poderosa que puedas. Si eres un profesional, que ni siquiera se te ocurra ahorrar en ahorrar dinero con las tarjetas gráficas y motherboards – el tiempo es dinero y simplemente perderás mucho si no compras lo mejor y más nuevo – a menos que hagas edición de vídeo básica. Puedes comprar tarjetas para videojuegos no tan caras, y pueden resultar poderosas, pero tal vez no sean totalmente compatibles con las grandes aplicaciones profesionales y encuentres dificultades a la hora de conseguir ayuda en caso de necesitarla.
Software de segunda mano tal vez cumpla con la tarea si es que no necesitas las funciones más nuevas, pero si eres como yo, te encontrarás deseando tener lo que todos tus colegas están usando y que sabes que hará tu vida más fácil. Yo en este caso optaría por una suscripción, que no es tan cara y significa que siempre tendrás las versiones más nuevas. Yo no soy de esas personas que creen que las suscripciones son el peor invento del mundo. Yo probablemente nunca compraría la suite completa de Adobe, sin embargo si pagaría una suscripción. Debo añadir que como editor en RedShark, Adobe *me da* una suscripción.
¿Y las cámaras? Aquí es donde se pone complicado y no estoy diciendo que yo tengo todas las respuestas ni por un minuto.
Con las cámaras, necesitas fijarte en el paradigma actual del área donde te encuentras trabajando. ¿Qué quiero decir con paradigma? De hecho no estoy seguro que sea la palabra correcta, pero se acerca.
El paradigma actual es que lo que la gente requiere y espera en el campo donde estas trabajando, y es ampliamente reconocible que da resultados aceptables.
Uso la palabra “aceptable” como consejo, porque suena como si debiera significar “solo aceptable”. Así no la usaría. Pero ejemplo, si estás haciendo una película que es candidata para una nominación al Oscar, lo que es aceptable es un estándar muy alto- Tal vez una mejor manera de ponerlo es hablar en términos de lo que es aceptado por tus colegas. Si alguno de ellos dice “es una gran película, pero algunos aspectos visuales me preocupan”, entonces no es aceptable.
Si estas haciendo películas que la gente va a ver en sus smartwatches (una pantalla pequeña) entonces tal vez puedas bajar un poco el estándar, sin olvidar que entre mejor sea la calidad con la que comienzas, incluso aunque lleves una gran compresión en el proceso, el resultado será mejor.
¿Qué tal si haces videos de bodas? Estos también se tienen que ver bien para tu audiencia. Pero ¿Qué es lo que esa audiencia en particular espera? Ellos probablemente esperan cierto “look” que se obtiene fácilmente con la profundidad que te da una DSLR.
El punto es que ahora hay muy buenos ejemplos de cámaras para todos los campos y especialidades. Estamos incluso delante de la curva del consumidor con 4K, justo como cuando la creación de contenido HD llevo al consumo de contenido HD hace 10 años.
Así que porque esperamos tan ansiosamente los nuevos modelos? creo que es por varias razones.
Primero, es emocionante, simplemente lo es. Siempre es divertido cuando un fabricante nos sorprende con algo nuevo que cambia las cosas y creo que cada vez pasará más seguido. Es contra intuitivo porque puedes pensar que ya todo se ha inventado. Pero no funciona así, cada nueva invención empuja las cosas cada vez más, y esto significa que la siguiente innovación es probable que llegue más temprano que tarde.
Nuevas cámaras 4K por todos lados.
Simplemente observa a los anuncios de NAB de la semana pasada: cámaras 4K por todos lados, algunas de ellas de los fabricantes que hasta hace un par de años eran conocidos por hacer tableros I/O que dispositivos ópticos.
Siguiente, esperamos que todo se vuelva más barato. Las características que tanto hemos anhelado y que siempre han estado fuera del alcance económico de los consumidores promedio, están llegando a nuestros rangos de presupuesto (a menos que quieras esa lente exótica que le lleva a alguien 5 meses construirla a mano).
Finalmente, tal vez vemos las presentaciones de las nuevas cámaras para informarnos (o reafirmar) acerca de hacia dónde va la industria. Después de todo, ninguno de nosotros quiere comprar una cámara que nos llevaría a terminar con un formato muerto.
Con más opciones que nunca, los riesgos son mayores. Lo que significa es que es más probable que compremos un producto que no se ajuste a tus necesidades, o con una vida útil muy corta, obsoleto o que se vuelva irrelevante antes de terminar de pagarlo. Lo que hace aún más importante que compremos cámaras que hagan justo lo que necesitamos. Esto lleva un proceso de mucha investigación, y esta investigación necesita estar actualizada. Observa las tendencias. Entre mejor las entiendas, tus decisiones de compra serán mejores. Puedes comprar una cámara ahora y estar seguro de que cumplirá con el trabajo. O puedes comprar una que vaya más con las tendencias, pero tomas el riesgo de que no sea exactamente lo que quieres.
Si tomas una decisión equivocada, hay dos cosas para consolarte. Primero. Probablemente no gastaste tanto en ese error como lo hubieras hecho hace algunos años. Y Segundo, No hay muchos productos en el mercado que sean realmente tan malos, y si te equivocaste, ebay es tu amigo.
Pero si tomas la decisión correcta, habrás comprado una cámara con mas resolución, una mejor imagen y un precio más bajo. Algo que hace algunos años hubieras pensado que era imposible.
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